En la actualidad, la mayoría de las empresas y negocios conocen la importancia de una estrategia de publicidad para posicionar su marca, dar a conocer un nuevo producto, informar sobre un evento importante, lanzar promociones, entre otros. Con ello, buscan llegar a una meta o varios objetivos delimitados, para lo cual puede ser de gran ayuda la implementación de una pieza de gigantografía. 

Gigantografías: publicidad para atraer desde la vía pública

Las gigantografías son elementos tipo carteles impresos de gran tamaño, superior a un estándar común, que puede variar en sus dimensiones. La finalidad de estos es hacer visible el mensaje en una gran proporción para que todo el público pueda ver la publicidad, desde cualquier ángulo, o incluso, estando en movimiento.  

Estos carteles pueden situarse en el interior de plazas comerciales, terrazas, cafeterías, autopistas y cualquier otro tipo de espacio público para publicitar una marca, empresa, productos y todo lo que se desee. 

De la misma forma, la gigantografía funciona para dirigir a un público hacía un lugar específico, por lo que es muy funcional para emplear en carreteras y comunicar el camino a seguir para llegar a una comunidad o cierto atractivo turístico.

Ahora bien, hay que saber de la existencia de la técnica de building wrap, que permite cubrir una área extensa con el mismo fin: apoyar las campañas de publicidad de las empresas. Por esa razón, se suele pensar que, tanto la gigantografía como los building wrap, son las mismas estrategias. 

¿En qué se diferencia el building wrap y la gigantografía?

Como se mencionó, la gigantografía se aplica en forma de grandes carteles para la promoción de un producto, servicio o marca y lo mismo ocurre con el building wrap. Sin embargo, esta última técnica se especializa en el empleo de carteles enormes, capaces de cubrir un edificio o gran parte de uno.

En específico, el building wrap reúne las siguientes características:

• Publicidad en la fachada de un edificio e inmueble.
• Se utiliza una tela como material base para el cartel.
• Medidas de gran tamaño que pueden superar los 100 m².
• Se ubican en sitios con un alto flujo de personas.
• Por otro lado, las gigantografías se diferencian por tener más opciones para la colocación de los carteles, pues no solo se aplican en edificios, sino también en carreteras, centros comerciales, tiendas, autobuses, espectaculares en puentes, entre otros espacios donde haya un gran flujo de personas. 

De igual forma, en la gigantografía se utilizan distintos materiales para imprimir la publicidad, como son lona, vinilo autoadhesivo, tela canvas, papel fotográfico, papel de algodón y más tipos de materiales.

Inclusive, la diferencia de las gigantografías es que su medida puede variar totalmente dependiendo del espacio donde se coloque, en comparación con el building wrap que cuenta con medidas más enfocadas para los edificios. 

En consecuencia, por las similitudes que existen entre estas técnicas, podría definirse que la gigantografía es una estrategia específica que aplica a grandes carteles y que, dentro de la misma, está la opción de aplicar la técnica enfocada en abarcar las fachadas de los edificios. Sin duda, las gigantografías son el formato por excelencia para atraer la atención de todos los públicos, sin importar su edad o género. 

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Fuente: www.crehana.com/ar/.../cuales-son-las-medidas-para-un-cartel